Por Sophia Gildemeister , Directora del Centro de Nutrición Integrativa de Chile
Hoy más que nunca estamos constantemente expuestos a toxinas ambientales, que la mayoría de las veces no podemos evitar. Es difícil identificar qué tipo de toxinas son, pero están presentes en muchas cosas, como por ejemplo: plásticos, pesticidas, residuos de agua sin filtrar y en general, en lugares que no podemos ver ni medir.
Debemos ayudar a nuestro organismo a evitar estas toxinas, así como a deshacerse de ellas. Cuando nuestro cuerpo tiene un exceso de toxinas, puede desarrollar inflamación.
La inflamación es una respuesta fisiológica de nuestro cuerpo. Es entonces cuando intervienen el sistema inmunológico y el sistema de defensa del organismo, para eliminar invasores extraños o reparar tejidos dañados. En palabras simples, la inflamación es una respuesta de defensa del cuerpo cuando algo anda mal.
Esto se conoce como “estrés oxidativo”. El estrés oxidativo significa que hay muchos radicales libres circulando por nuestro cuerpo.
Los radicales libres aparecen debido a cambios químicos que ocurren en una célula. Estos suelen acumularse en las células y dañar otras moléculas. Por tanto, pueden provocar una enfermedad.
Una forma de combatir estas toxinas y enfermedades es equilibrando nuestro pH. Este es el equilibrio de ácidos alcalinos en cada sustancia, lo que nos brinda salud y bienestar. El pH está directamente relacionado con el sistema inmunológico, por eso tenemos que cuidar de mantener nuestro cuerpo en un pH neutro.
Entonces, cuando nuestro sistema inmunológico se equilibra con un pH óptimo, con una carga de toxinas reducida, es muy poco probable que podamos desarrollar inflamación y causar daño a células, tejidos y órganos.
Entre los elementos que pueden desintoxicar el organismo se encuentra el agua, pero siempre y cuando esta agua sea tratada adecuadamente. Necesitamos consumir agua de buena calidad: filtrada, mineralizada y magnetizada.
La jarra Alkanatur es una excelente alternativa para consumir agua de calidad, ya que su filtro alcaliniza el agua, ayudando al cuerpo a salir del estado ácido, logrando niveles de pH más alcalinos.
Evite beber agua del grifo, de bidones o comprar agua embotellada en los supermercados, ya que desconocemos si tuvieron el tratamiento correcto. Por eso, recomiendo a mis pacientes que la mejor forma de hidratarse es bebiendo agua de buena calidad, principalmente alcalina.
Alkanatur apuesta por solucionar este problema, ofreciendo la mejor agua del mercado. Su cántaro está certificado por diversas instituciones de prestigio como el Instituto de Cerámica de Galicia, la Universidad de Santiago de Compostela, Hospital Sant Joan de Déu, entre otras.
Beber agua alcalina tiene múltiples beneficios, además de tener un gran poder antioxidante que combate los radicales libres, es la mejor fuente de hidratación que podemos elegir. Favorece a nuestro organismo a desechar residuos, oxigenando las células y neutralizando los niveles de acidez de nuestro organismo, mejorando nuestra salud y también nuestra calidad de vida.