Al entrar en el nuevo año, es importante recordar que los cambios sostenibles ocurren cuando nos tomamos las cosas con calma. Intentar hacer demasiado, todo a la vez, es una receta para la decepción. En lugar de ello, ¿por qué no implementar un puñado de nuevas rutinas positivas que puedan mejorar su calidad de vida?
Mejorar el agua potable y de baño puede ser un sencillo punto de partida. Al eliminar los contaminantes, puede ayudar a proteger la salud de su familia. Seleccione un sistema de filtración de agua, ya sea uno para toda la casa, o un filtro de jarra y ducha, que tenga un rendimiento superior al promedio. Las marcas con respaldo científico, como Alkanatur, ofrecen tranquilidad y tienen un precio muy asequible.
Prometer comer más verduras, legumbres y alimentos integrales es otro paso en la dirección correcta. Puede ser tan fácil como agregar una porción extra de vegetales en forma de mezclas congeladas, agregar una lata de frijoles a una olla de chile o elegir beber un poco de jugo de tomate en lugar de algo más afrutado. Lo mejor de todo es que esto no tiene por qué interferir con el disfrute de sus comidas favoritas. Piense en estos pequeños cambios como complemento a su dieta, en lugar de una revisión.
La calidad del aire es algo que a menudo puede pasarse por alto. Optar por evitar productos perfumados, sartenes de teflón e invertir en un filtro HEPA puede mejorar drásticamente uno de nuestros factores más importantes en lo que respecta a nuestra salud. Las velas, los detergentes para la ropa e innumerables productos de baño y de belleza están saturados de olores peligrosos, que pueden ser disruptores endocrinos. Hacer que tu hogar sea un poco más ecológico es tan fácil como eliminar al menos algunos de estos productos.
Elegir materiales naturales para tu ropa es otro cambio menos obvio. Las fibras sintéticas no son transpirables, irritan la piel y contribuyen a que se liberen microplásticos en nuestros sistemas de agua cada vez que pasan por la lavadora. Elegir algodón, lino y lana puede marcar una gran diferencia en su bienestar.
Lo lento y lo simple ganan la carrera, así que no importa cuál de estas opciones te guste, recuerda que la vida es un maratón. Si realiza una caminata adicional una vez a la semana o recuerda actualizar su lista de compras básica para incluir algunas espinacas y lentejas, es mejor que no hacer nada. ¡Todo el mundo empieza la vida con el primer paso!